AHORA LA INGRATITUD ES "SIMBÓLICA"

AHORA LA INGRATITUD ES "SIMBÓLICA"

Definitivamente ya no sé que tengo si rabia, desconcierto, asombro, o pesar. Al ver en el noticiero de anoche a una Ingrid Betancourt decaída y sin rumbo, tal vez más que durante el mismo secuestro, balbuceando la defensa de su posición, que en nada creo yo, terminó convenciendo a los colombianos. Su "locura" terminó  convirtiéndose una vez más en un insulto para todos nosotros los que amamos el país, pues ya no solamente fuimos afrentados con una demanda disfrazada de conciliación sino que además se nos trató como a niños a los que la mamá o el papá les dan un dulce para que se porten bien. En otras palabras nuestra inteligencia fué víctima de ultraje cual si tuviéramos una sola neurona a la que fácilmente se le puede engañar con una frase digna de colocar en el estiércol de la mentira vulgar..."el dinero pedido en la demanda es una cifra simbólica"...Recuerdo la expresión y se me crispan los pocos pelos que me quedan en la cabeza al pensar que no solo la defecó en la entrada sino también en la salida cual mosca simbólica.

Si la cifra era lo de menos por qué no usó una cifra más "barata" como lo sugirió el periodista en su momento y el que atinó a modo de sugerencia a postular la cifra de 1.000 pesos. Pues finalmente y según ella lo que interesaba era el objetivo que no era otro que el de "buscar alternativas para los que han padecido este flagelo y ser solidaria con los secuestrados", objetivo que trató de tapar con su otra petición "contarle la verdad al pueblo colombiano", una verdad que no sabíamos....o que nos quería distorsionar....me pregunto, si buscando el perdón sincero o dejando abierto el camino hacia una próxima elección... vaya uno a saber.

Ahora, a nosotros nos dolía sin duda alguna que la suma en cuestión era exorbitante, pero en el fondo lo que más nos hirió fué la idea, el hecho de establecer una conciliación-demanda. Pues al fin y al cabo era como terminar nosotros debiéndole su torpeza y su poco reconocimiento a las acciones que de afuera se llevaban a cabo mientras ella permanecía secuestrada tiempo que aprovechó para exaltar las labores efectuadas por la no muy clara Piedad Córdoba y el no transparente dictador Hugo Chávez Frias.

Así es, no nos interesaba si la demanda era por cinco, diez o 1 peso, nos interesaba el sentirnos traicionados y nos sigue lastimando el hecho que pueda llegar a salir un fallo que impulse este tipo de causas en generaciones "pudientes". Pero supongamos que la demanda hubiera sido por los mil pesos sugeridos por el periodista; y supongamos también que el falló judicial le da la razón a Ingrid-Ingratitud; acaso esto no hubiera sido el punto de lanzamiento para nuevas demandas, esta vez no por mil pesos, sino por millones de millones de pesos. En donde hasta los narcos y delincuentes o aquellos que se gozan en el falso secuestro o en los falsos atentados pudieran acusar a un gobierno "por lo que hacen que les pase", tal y como hizo la señora Ingratitud.

Y es que no cabe en la mente humana creer en "el no me acuerdo haber firmado" o "qué firme", más cuando la señora en mención recuerda los nombres de los generales que hablaron con ella, y recuerda cuantas horas se demoró y recuerda tantas y tantas cosas, pero su memoria no le da para evocar el momento en que firma su "responsabilidad en seguir hacia adelante en búsqueda de San Vicente del Caguán" o tal vez deba decir en búsqueda del secuestro...y porque no decirlo tal vez contando con una liberación o negociación pronta del posible -que se hizo realidad- secuestro.

No basta decir "no me brindaron la seguridad" y miente al decir que no se le advirtió como consta en los documentos que hacen parte en los archivos del ministerio de defensa y como consta en las declaraciones de los escoltas y como sabemos tantos que la vimos ensorbecida en una gloria que jamás alcanzaría. No basta decir que el gobierno no le ayudó, pues se necesitan tres dedos de frente para saber que la zona en mención era zona en conflicto armado y que no es función del gobierno impedir que un candidato ingrese a un sitio en donde de hecho y como se dió a conocer en diferentes medios de comunicación la violencia y el riesgo era latente.

Si, la verdad es que Ingrid-Ingratitud tiene como apellido mentirosa...y afortunadamente para muchos liberados gracias a la acción de la justicia colombiana sus libertades a veces conseguidas con precio de sangre de verdaderos heroés no es simbólica....Esperemos que en la próxima entrevista Ingrid-Ingratitud no diga que sus anteriores palabras también fueron simbólicas....